¿Piensas que tu pareja te está siendo infiel, pero tienes dudas de si realmente lo está siendo? Estás en el lugar indicado. A lo largo de este artículo te vamos a mostrar una serie de claves que te ayudarán a conseguir que tu pareja te confiese la infidelidad. Son fáciles de poner en práctica y así podrás salir de dudas.
1- Contratar a un detective privado
La mejor opción por la que puedes optar es contratar los servicios de un buen detective privado. En este caso, los detectives privados expertos en infidelidades en Madrid de Doverty.es te ayudarán a resolver el caso con mucha facilidad. Son expertos en seguir a la pareja y ver si realmente están siendo infieles o el motivo de la ausencia es otro.
Contratar los servicios de los detectives Doverty es muy fácil. Solo hay que ponerse en contacto con ellos, decirles cuál es el caso que deben investigar y ellos se encargarán de realizar todo el proceso de seguimiento.
Cómo son realmente buenos en su oficio, el investigado no se dará cuenta de que está siendo seguido. Así actuará de manera normal y será fácil saber si realmente le está siendo infiel a la pareja o no. Normalmente este tipo de profesionales ya tienen mucha escuela, es decir, desde los primeros indicios suelen saber si las sospechas son reales o no. Eso sí, la investigación la llevan a fondo para certificar si la infidelidad existe o no.
2- Siempre hay que prestar atención a las palabras
Las personas infieles, al igual que las mentirosas suelen sobrecargar sus respuestas con abundantes pormenores, una vez más, con el fin de velar por lo que prefieren no divulgar.
Una investigación ha revelado que quienes faltan a la verdad tienden a confundir la inclusión de excesivos detalles con la honestidad, una estratagema que facilita la detección de su deshonestidad.
Cuando converses nuevamente con tu pareja, observa con detenimiento las expresiones que emplea. ¿Incorpora datos irrelevantes, como el color del calzado de alguien? ¿Se desvía del tema al responder? Es plausible que puedas señalar y lograr que admita su falsedad.
3- Apuesta por ser amigable
Aunque resulta comprensible experimentar una fuerte reacción de enojo ante la sugerencia de que podría estar actuando de manera deshonesta, no siempre es la estrategia más efectiva.
Cuando te enfadas, lo insultas o entras en discusiones con él, esto solo lo motivará a evitar interactuar contigo en todo momento. A pesar de lo desafiante que pueda resultar, siempre es fundamental mantener un comportamiento civilizado y esforzarse por ser la parte más madura en la relación.
Si sientes la necesidad de expresar tu enfado, puedes buscar el apoyo de un amigo cercano para compartir tus sentimientos.
Mostrar amabilidad también puede, de manera indirecta, llevarlo a experimentar culpabilidad por sus acciones y eventualmente llevarlo a sincerarse.
4- Pon a prueba su coartada
Después de haber inquirido acerca de sus actividades de la noche anterior, puedes replantear la cuestión en los días sucesivos, introduciendo una variante mínima, como el momento de su llegada al lugar o la compañía que le acompañaba. Posteriormente, puedes aludir de manera sutil a esta modificación e indagar si tu descripción concuerda con la realidad.
En caso de que no efectúe ninguna corrección, este hecho puede constituir otra indicación desfavorable. En el siguiente interrogatorio sobre la veracidad de su relato, podrías hacer referencia a la debilidad e incoherencia de la historia que compartió contigo.
Para obtener una confirmación más sólida de su coartada, podrías dar un paso adicional investigando con las personas que supuestamente le acompañaron, con el fin de corroborar si respaldan sus afirmaciones.
5- Afirma que sabes lo que está pasando
Una manera de motivarlo a decir la verdad consiste en manifestar tu convicción de que te está siendo deshonesto. Comienza a comportarte como si estuvieras dispuesto a poner fin a la relación en ese mismo momento, a menos que él demuestre que tus suposiciones son incorrectas.
Señala las falsedades que ha comunicado y las acciones que ha emprendido que te han resultado sospechosas. No obstante, es fundamental que mantengas la compostura en todo momento. Ceder ante la ira solo resultará en una pérdida de control sobre la situación.
Si perseveras en mantener la calma y la sensatez, es posible que logres obtener la verdad de él en un intento por aplacar la situación.
6- Hazle caer en la trampa con buen humor
De acuerdo a una investigación, una estrategia empleada para interrogar a individuos involucrados en actividades delictivas consiste en elogiarlos y generar un ambiente positivo. Esta táctica es conocida en términos generales cómo «suavizar el terreno».
Cuando perciba que la persona está disfrutando de la conversación, puede plantearle la pregunta de si ha proporcionado información falsa.
Es posible que el individuo se encuentre tan inmerso en el momento que revele la verdad de forma involuntaria.
Aunque no garantiza de manera absoluta la obtención de una confesión, esta estrategia al menos aumentará las probabilidades de que la persona confiese.
7- Fíjate bien en su lenguaje corporal
Durante un extenso período, la comunicación no verbal ha desempeñado un papel fundamental en la detección de la veracidad de las afirmaciones de una persona.
Un análisis revela que, en situaciones de alto riesgo, como la perspectiva de una posible separación, individuos que faltan a la verdad tienden a mostrar una serenidad inusual y reducen considerablemente su contacto visual con la persona con la que interactúan.
Este mismo estudio concluye que quienes no dicen la verdad tienden a hablar en un tono elevado y a reprimir sus labios.
La próxima vez que inquieras acerca de las actividades de alguien o desees corroborar su relato previo, es conveniente prestar especial atención a sus gestos faciales. Mantener un contacto visual directo y observar si sus ojos se desplazan de un lugar a otro en la habitación puede resultar instructivo.
Asimismo, el estudio señala que los individuos que mienten suelen experimentar un mayor nerviosismo y ser más propensos a expresar quejas.
Por lo tanto, si notas que la persona se queja con mayor frecuencia o expresa de manera más abierta sus frustraciones, podría ser una señal de que está ocultando información, lo que te permitiría abordar la situación para obtener una confesión sobre lo sucedido.
8- No olvides preguntarle cada cierto tiempo
Es habitual que las personas que dicen mentiras olviden los detalles de sus engaños, ya que suelen experimentar un alivio tras haber mentido con éxito.
En la mayoría de los casos, quienes mienten suelen perder la noción de la falsedad que expusieron en su versión inicial.
Si observas que relatan una narrativa completamente distinta o que algún detalle difiere de lo que expresaron inicialmente, esto constituye una evidente indicación de que están simulando.
Incluso puedes repetir tu pregunta con el propósito de tomarlos desprevenidos cuando su atención esté dispersa.
Si comienzan a titubear o requieren un tiempo excesivo para recordar los detalles, esto podría ser una señal de que han estado siendo deshonestos.
Asimismo, existe la posibilidad de que revelen la verdad de manera accidental cuando los tomes por sorpresa, por lo que es conveniente ser estratégico en cuanto al momento en que vuelvas a formular la misma pregunta.